El Rally de Francia que se celebra del 2 al 5 de octubre va a dar el banderazo de salida a la ‘fase final’ del Mundial de Rallies ya con el título de constructores decidido pero con el de pilotos aún en el aire. En uno y otro plano el protagonismo se centra en Volkswagen. El equipo alemán ya tiene a su nombre el campeonato de marcas y dos de sus escuadras, las de Sébastien Ogier- Julien Ingrassia y Jari-Matti Latvala-Miikka Anttila van a medir sus fuerzas en asfalto por ese número uno que de momento ocupan los franceses.
Las cuentas de Ogier para renovar su título mundial en el mismo escenario en el que logró el primero de su carrera deportiva no son muy complicadas. Si suma seis puntos más que el finlandés el campeonato será suyo otra vez y esto es viable si, por ejemplo, gana la carrera y además es segundo en el Power Stage.
“Mi objetivo es proclamarme Campeón del Mundo de nuevo en mi país. Una victoria podría ser suficiente, pero creo que Jari-Matti volverá a ser mi rival más cercano. El Rally de Francia es parecido al de Alemania. Es decir, tiene algunos tramos entre viñedos. Sin embargo, también hay grandes diferencias. Por ejemplo, muchos tramos se disputan en los bosques. El asfalto puede estar muy húmedo y resbaladizo en estas especiales. No hay tantos cruces como en Alemania y los tramos suelen ser mucho más rápidos y bonitos para pilotar. Tenemos que hacer nuestro trabajo mejor que en Alemania, donde los dos acabamos fuera de carrera”, recuerda Ogier, que ha ganado en dos ocasiones esta carrera.
Latvala, en cambio, necesita terminar por delante de Ogier si quiere mantener viva la batalla por el título de pilotos. En su caso lucha contra su compañero en su propia casa, pero también contra la estadística. Hace 15 años que un finlandés no gana en asfalto y en Alsacia nunca un conductor nórdico ha sido capaz de inscribir su nombre en el palmarés. Aún así Jari-Matti, que rozó la gloria en Alemania, no da nada por imposible.
“Tengo una cuenta pendiente con los rallies de asfalto”, admite siempre sincero Latvala. “El Rally de Alemania fue muy decepcionante. Iba muy bien, pero todo terminó en un instante después de mi accidente. Tras haber estado tan cerca de la victoria en Alemania, estoy decidido a conseguir mi primer triunfo sobre asfalto”. Sobre sus posibilidades de alcanzar el título, considera que aunque existen, “no son realistas”. “Para lograrlo, Sébastien debería tener muchos problemas, mientras que a nosotros nos tendría que salir todo perfecto. Una cosa es cierta, mientras haya opciones matemáticas, seguiré luchando y dando lo mejor de mí. Nunca se sabe lo que puede pasar”.
Al contrario que su compañero y rival, Latvala cree que la prueba francesa y la germana no pueden compararse. “Aquí pasaremos mucho más tiempo en los bosques y en bonitos puertos de montaña, mientras que en Alemania las carreteras son muy estrechas y sinuosas. Las características de este rally son las más parecidas a las del Montecarlo”, apunta.
Aunque el foco se centrará en Ogier y Latvala, habrá más rivales por la victoria en Francia. Se espera un gran rendimiento de Kris Meeke con el Citroën DS3 WRC y también de los Hyundai i20 WRC de Dani Sordo y Thierry Neuville, un dúo que en Alemania regaló a la marca coreana su primer doblete mundialista.
Con sede una vez más en Estrasburgo, los 18 tramos que conforman Rally de Francia llevarán a los competidores a las regiones francesas de Bas-Rhin, Haut-Rhin y los Vosgos, con sectores de montaña con curvas estrechas alternadas con sinuosos caminos rápidos, forestales y de carreteras comarcales que pondrán a prueba las habilidades de los pilotos.
Su itinerario de poco más de 300 kilómetros empezará a consumirse el jueves 2 de octubre con una ceremonia de salida en el centro de Estrasburgo, con la verdadera acción a partir del día siguiente, con siete especiales que se corren a lo largo del Bas-Rhin y los caminos de los Vosgos. La segunda etapa en la región de Haut Rhin será la más larga del evento con más de 125 kilómetros de la competición, que incluirá un servicio remoto en Colmar. Esto significa que los participantes únicamente se dirigirán al parque de asistencia principal al final de la jornada, después de un largo día de rally. La última jornada del rally el domingo 5 de octubre cuenta con cuatro etapas, incluyendo el Power Stage, Forêt de Saverne, donde los puntos adicionales están en juego.
