Tercero en el Campeonato del Mundo de Turismos (WTCC) en 2014, Sébastien Loeb vuelve al WRC después de más de un año fuera del mundo de los rallies. Acompañado de nuevo por su copiloto Daniel Elena, el piloto francés no dudó un segundo cuando Yves Matton le ofreció la posibilidad de pilotar de nuevo el DS 3 WRC. “Cuando Citroën Racing me ofreció la oportunidad de tomar parte en este rally, no tardé mucho en decidirme. El Montecarlo se celebra en carreteras francesas. Me encanta el ambiente y lo cerca que estamos de los fans. También me alegro de recuperar esa sensación especial de estar en el DS 3 WRC”, asegura ‘Seb’, cuyo último triunfo en este campeonato lo logró en Argentina hace dos años.
El Citroën DS 3 WRC que se ha encontrado Loeb en su vuelta no es exactamente el mismo que dejó en el Rally de Francia de 2013. Citroën Racing anuncia “mejoras significativas” en el coche que cumple su quinta temporada de servicio. De modo genérico se habla de motor, suspensiones, caja de cambios y también aerodinámica, aunque Xavier Mestelan-Pinon, Director Técnico del equipo, entra más en detalle. “Nos hemos centrado en el motor para que entregue más potencia y par, mejorando al mismo tiempo la fiabilidad. Aprovechando los cambios en la normativa, hemos introducido palancas de cambio en el volante. Otras mejoras se han realizado en la aerodinámica, con un nuevo spoiler y un frontal nuevo que se presentará dentro de poco, así como cambios en la distribución de pesos con el uso de piezas más ligeras. Por último, hemos alterado la cinemática de la suspensión trasera. El trabajo sigue adelante y, en los próximos meses, presentaremos otra mejora aerodinámica”, asegura.
Loeb ha tenido que volver a poner el modo rallies después de tanto tiempo centrado en la conducción en circuito. Aún así, el alsaciano afirma que volver a sentirse cómodo fue cuestión de poco tiempo. “El primer día de test tuve que volver a acostumbrarme, pero todo volvió a ser como era pronto. El estilo de pilotaje es muy distinto de al que me he acostumbrado con el C-Elysée WTCC. Con tracción a las cuatro ruedas y carreteras normales, hay que improvisar mucho más”, explica el nueve veces Campeón del Mundo de Rallies
Voviendo a esos test, Loeb, que sin duda asesoró a los ingenieros de la marca en ese paso adelante técnico que están intentando realizar, dijo que fueron “útiles”, pero quizá poco efectivos a la hora de preparar una carrera de las características de Montecarlo. “No se pueden predecir las condiciones que habrá esos días. Mi objetivo es ser competitivo, hay que recordar que no he competido en un rally de este nivel desde hace más de un año. Cada vez que empiezo una carrera, doy el máximo y esta vez no será distinto. Si podemos luchar por la victoria, mejor que mejor”, ha añadido.
Eclipsado por la figura de ‘Seb’ el resto de pilotos del equipo correrán sin los mismos índices de presión que soportarán el resto de la temporada. Kris Meeke tiene grandes expectativas en su segundo año completo con Citroën y por las mejoras que se han hecho en el coche. “Citroën Racing siempre ha tenido grandes resultados en el Montecarlo y el equipo tiene mucha experiencia en esta prueba. Y aunque es imposible predecir lo que pasará en este rally, poder contar con un equipo así es sin duda una gran ventaja. Mi objetivo es luchar por una de las primeras posiciones”, dice el norirlandés.
Mads Ostberg, por su parte, quiere mantener la buena inercia con la que acabó la temporada, pero prefiere encarar esta prueba con la mente abierta. “Voy a tomar cada carrera como venga y espero que ese enfoque de sus frutos. El Montecarlo es potencialmente el rally más difícil del año. Dependiendo de las condiciones, puedes tener asfalto seco, mojado, hielo y nieve… y a veces todo con los mismos neumáticos. Puede ser un gran reto. Para tener un buen Montecarlo hay que hacer la elección de neumáticos, tener buenas notas, y el equipo adecuado”, señala el noruego.
