Casi con total certeza, el Campeonato de Canarias de Rallys de asfalto se va a quedar esta temporada sin su número uno. Marco Lorenzo quiere probar fortuna en el nacional aunque para ello tenga que bajar varios peldaños en cuanto a potencial del vehículo. “Habrá que bajar otra vez la escalera para volverla a subir algún día. No tengo ningún problema en dejar un Ford Focus RS WRC o un Grupo N para ponerme al volante de un coche más pequeño. Estoy preparado para ello”, ha declarado el tinerfeño al programa ‘Kilómetro 103’, que un año más seguirá en Radio Canarias.
Lorenzo afirma tener varias ofertas para correr en 2012, “algunas más avanzadas que otras”, y aunque reconoce que ahora “hay que trabajar rápido en los despachos” para conseguir el presupuesto, tiene un 80 por ciento de posibilidades de estar en el Campeonato de España de Rallys de asfalto esta temporada. La primera cita del calendario en el Rally Islas Canarias ‘El Corte Inglés’ que se celebrará del 15 al 17 de marzo, y cuenta con ese límite.
Asumido que lo que tocará el año de su debut será aprender y hacer kilómetros, el ex piloto oficial de la Red Ford de Canarias prefiere encarar esta temporada con una mecánica humilde con la que poder cumplir esa doble meta. No habla de podios ni de victorias en su categoría. “Lo importante es volver a ser una esponja. Toca aprender y empezar de cero. Hacer ese trabajo sucio para poder estar en un futuro con los mejores. Ya tengo una experiencia y sé que hay que empezar desde abajo, con un coche pequeño para poder hacer kilómetros y así ir obteniendo un bagaje en el campeonato”, explicó Lorenzo, que en caso de correr en las islas, lo haría “de forma esporádica”, y sólo “para no estar tanto tiempo parado”.
Preguntado sobre las alternativas, el tinerfeño reconoció que las dos copas monomarca que se celebran en el marco del Campeonato de España son muy interesantes. “Ahí hay gente con mucha experiencia, y eso me permitiría aprender”, admitió Marco, que se tendrá que decidir entre pilotar un Renault Twingo R2 del Challenge, o el más económico –pero también más básico- Suzuki Swift de la copa. El precio, las prestaciones de los vehículos, pero también el calendario de carreras, parecen ser factores que tendrá muy en cuenta.
En este sentido, el piloto está estudiando en qué pruebas debería inscribirse para ir adquiriendo ese bagaje de cara a aspirar a metas más altas en el nacional. Y siempre con el handicap de la distancia y la insularidad, detalles que, calcula, encarecen el programa alrededor del doble de lo que le supondría a un equipo de Penínsua. Lo que está decidido es que no contará con una estructura técnica propia porque “encarecería muchísimo el proyecto”, aunque sigue contemplando la posibilidad de contar con algún tipo de asesoramiento del que ha sido su equipo en la mayor parte de su etapa en rallys, Copi Sport, y más concretamente la figura de Fernando Capdevila.