Con el recuerdo aún en la memoria del inesperado fallecimiento de María de Villota, se disputó en la isla de Tenerife la gran cita automovilística con la montaña. Una nueva edición de la Subida a Tamaimo precedida de un cartel excepcional encabezado por el actual campeón autonómico de la modalidad, Enrique Cruz, y en el que también convergieron todo un especialista como es José Antonio Aznar y Miguel Fuster como único representante del equipo Auto Laca Competición que volvía a la rampa sureña después de ocho años. El lanzaroteño Yeray Lemes se caía finalmente de la convocatoria al detectarse una avería en la centralita del Ferrari 360 Rally en unos test previos a la realización de la prueba.
Nutrida inscripción también en la categoría de barquetas con 14 participantes. Y es que como se suele decir Tamaimo tiene un atractivo especial y ni el campeón autonómico, José Manuel González ni Jonathan Morales, su gran rival esta temporada por el entorchado regional, quisieron perderse la oportunidad de acudir a esta cita. Sin embargo el primer zarpazo oficial al crono lo daba Julián Falcón (Silver Car S2) aventajando en un segundo a González y Morales que concluían esta primera ascensión separados por 354 milésimas. Todo ello después de que el grancanario tuviera reparar la rotura de un eje que le impidió llegar a meta en la manga de entrenamientos.
A su zaga, Pedro Javier Afonso (Silver Car S2) fue el único capaz de aguantar el ritmo impuesto por el trío de cabeza, con medias de 112 km/h de velocidad, quedándose a un segundo del tiempo realizado por Jonathan Morales.
Lejos de la reacción, la segunda manga no ofreció variaciones con respecto a lo acontecido anteriormente dado que ninguno de los candidatos rebajó el listón establecido durante su primer enfrentamiento. Por su parte Benito Martín (BRC 05 Evo), quinto, a punto estuvo de perder su posición a manos de Alejandro Álvarez (Silver Car S2) que fue de los pocos que logró rebajar su tiempo quedándose a tan solo dos décimas de sumarse al top five de la clasificación.
Cruz gana con suficiencia
En turismos y a pesar de que el discurso previo a esta cita era el ir a divertirse sin tener en cuenta lo que acontecía en el crono, Enrique Cruz (Porsche 911 GT3) parecía no tener dificultades para erigirse como el piloto a batir reflejo del espectacular momento de forma que atraviesa el santacrucero. Su participación también sirvió para comprobar que todo estaba en su sitio con vistas a una cita crucial como es el Rally Isla de Tenerife. Antes tendrá que superar otro escollo en su carrera por revalidar el título autonómico de montaña, la Subida de Moya que tendrá lugar en apenas dos semanas.
Cruz marcó un tiempo de 3:08.478, una auténtica losa para sus dos principales rivales que ni siquiera se acercaron a la barrera del 3:10, empeorando ostensiblemente el registro del piloto del equipo Disa Copi Sport. José Antonio Aznar (Porsche 911 GT3), pluri-campeón nacional de montaña, incluso tuvo que claudicar ante Miguel Fuster lamentándose de que el vehículo no contaba con los reglajes adecuados para enfrentarse al característico trazado del sur de Tenerife. El alicantino, por su parte, que no disfruta especialmente de esta especialidad, atendió la invitación de Ángel Ramos, director de Auto Laca Competición, para poner a punto el Ferrari con vistas a las dos últimas pruebas del autonómico de rallies. Tras la primera fase de competición, Fuster se situó a seis segundos de Cruz con casi un segundo de ventaja sobre Aznar. En la segunda, el calor apretó con más fuerza lo que provocó que ninguno de los candidatos a la victoria mejorara sus tiempos manteniéndose el orden establecido en la primera manga oficial para configurar el pódium definitivo.
La cuarta posición fue para Antonio Gorrín (Citroën C2 S1600) que a pesar de la diferencia de potencia con el Porsche 911 GT3 de Chicho Acosta, lograba superarlo en la línea de meta. El palmero que venía mejorando sus parciales en la segunda manga veía truncada sus posibilidades al tener que atender el aviso de peligro de un miembro de la organización al encontrarse arrimado en la carretera el Mercedes 190 de Santiago Padilla. Lo mismo argumentaba Félix Brito (Mitsubishi Lancer Evo III), sexto a la conclusión de la prueba. Lo llamativo es que ambos pilotos y a pesar del contratiempo, lograban mejorar el crono realizado en la primera oficial. Cristo Padilla se quedó a sólo 131 milésimas de arrebatarle la sexta posición a Brito mientras Féliz García-Durán se lamentaba de problemas con la bomba de gasolina en el Alfa Romeo 156 TS lo que lastró en exceso su actuación.
Premio especial para Jorge Dorta (Citroën Saxo S1600) tras superar a Armando Díaz (BMW M3) y Gregorio González (Citroën Saxo Kit Car) en la última manga oficial apoderándose del noveno puesto tras superar a sus rivales por cuatro y ocho décimas respectivamente.
El triunfo en el Trofeo BP Ultimate de Promoción fue para Adrián Chávez (Opel Corsa GSI) superando a Fernando Díaz (BMW 325i) y Neftalí Martín (Citroën Saxo VTS) que mantuvieron un intenso duelo, alternándose las posiciones en ambas fases de la competición para terminar por este orden separados por 225 milésimas. El cuarto puesto fue para Juan Pedro González (Peugeot 206 XS) a menos de un segundo del piloto de Citroën.
El Trofeo 1.600 se destacó por la gran igualdad, decantándose la victoria finalmente a favor de José Luis Méndez. Por detrás y a casi tres segundos del ganador se clasificaron Neftalí Martín, Airam Cruz y Samuel Díaz, todos ellos con Citroën Saxo VTS y en apenas tres décimas. La quinta y última posición fue para Juan Pedro González (Peugeot 206 XS) que concluyó a 3,9 segundos de la victoria.