DEPORTE
WRC

El Polo R WRC se despide con números de récord

  • Ogier: "Este equipo ha sido como una familia para Julien y para mí"
  • Mikkelsen: "Estaba desesperado por ganar este rally para Volkswagen"

Aunque el rumor sobre la posibilidad de que los actuales Polo R World Rally Car puedan ser alquilados la próxima temporada –Autosport, el mismo medio que adelantó la marcha de la marca alemana, afirma que se van a ofrecer a equipos privados–, lo cierto es que en el Rally de Australia, Volkswagen Motorsport ha dado por cerrada su etapa en el Mundial de Rallies.

Desde su llegada al campeonato en 2013, sus Polo R WRC han disputado 52 rallies de los que han ganado 43, lo que supone una efectividad del 82,7 por ciento. Sus pilotos, Sébastien Ogier, Andreas Mikkelsen y Jari-Matti Latvala, han logrado 87 podios, la friolera de 640 scratch en 958 especiales y en 51 Power Stages celebrados en estas cuatro temporadas, han sumado puntos extra en 92 ocasiones.

Números de un fabricante que deja una profunda huella en el FIA World Rally Championship y que suponen el fin de una era. La nueva arrancará con el Rally de Montecarlo, con los nuevos WRC de 2017 más potentes y espectaculares y la duda de quién tomará el testigo de Volkswagen. Si lo heredará Hyundai, que ha logrado el subtítulo de constructores y el de pilotos con Thierry Neuville o si lo recuperará Citroën en su regreso como equipo oficial.

Para sus pilotos, que durante las próximas semanas deberán firmar con sus nuevos equipos, el Rally de Australia ha tenido una gran carga emocional. Sobre todo para Ogier, que ha tenido en el Polo el arma que necesitaba para convertirse en el heredero de su compatriota Loeb como dueño y señor del Mundial de Rallies. Este es un momento muy emotivo para mí –admitía el de Gap–. Tengo mucho que agradecer al equipo. Volkswagen Motorsport ha sido como una familia para Julien y para mí. He hecho muchos amigos y nunca olvidaré los momentos maravillosos que hemos tenido juntos durante los últimos años. Un viaje fantástico está llegando a su fin, y estoy orgulloso de haber formado parte de él”.

Ogier y Mikkelsen lucharon a brazo partido por la victoria en este último rally de la temporada. El noruego, que se estaba jugando el subcampeonato, aseguró que da mucho más valor a este triunfo que a un segundo puesto en el mundial de pilotos. “Estaba desesperado por ganar este rally para Volkswagen. Es fantástico haberlo logrado. Volkswagen es el equipo que me dio la oportunidad de entrar en la categoría reina del WRC. Depositaron mucha fe en mí y me hicieron mejor. Siempre tendrán un lugar especial en mi corazón. Si me hubieran dado la opción de elegir entre ganar nuestro rallye final juntos o de terminar subcampeón en el campeonato, siempre habría elegido la victoria”, señaló.

 

 

 

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